Una Asamblea Celeste


¡Bienvenidos hijos de mi amor! Bienvenidos seáis a este portal lumínico, a través del cual penetran las almas para entregar su sabiduría y su verdad.

 

Bienvenidos seáis a este encuentro celeste, donde las almas de las Jerarquías Superiores se unen para encontrar la unión para este mundo material, presentando la ofrenda de su sabiduría y de su amor para que se impregnen vuestros corazones y os elevéis a un mundo superior.

 

Las almas están presentes de tantos aquellos como ausentes son, porque ya dejaron este mundo y viven en otro de más luz, un mundo superior.

 

Bienvenidos a este concierto divino, donde todos se unen en una asamblea sin igual, elevando el tono vibratorio de esta Tierra, hacia un punto culminante de transformación sin par.

 

La Tierra va cambiando, va vibrando en una sintonía mayor, y con ello va empujando a todas las almas que residen, para irse acercando a ese tono superior. Y así, los cielos y la Tierra, se unen en esa armonía sin igual, para que los corazones de todos unidos, empujen hacia arriba, en dar ese tono más alto, de mayor elevación hacia el Padre Celestial.

 

Todo vibra en armonía, en sintonía con el Sol Central, pues de Él parten rayos, rayos de una potencia sin igual, que afectan a la estructura de esta galaxia y de todos los planetas que en ella se pueden encontrar.

 

Los rayos penetran a través de la materia en las distintas sintonías y vibraciones que puede tener, para ir ampliando su espectro de frecuencia y llegar a una mayor altura, donde el amor se expanda por doquier.

 

Todo va unido. Mayor vibración, mayor capacidad de amor. Mayor capacidad de penetración de ese amor divino que se funde con todo lo de su alrededor, para dar una estructura más amplia, un conocimiento más amplio porque la luz penetra hasta una profundidad mayor.

 

Así se alzan las mentes y los pensamientos de todas aquellas Jerarquías que mirando a esta Tierra pueden estar, para unir sus pensamientos a esa única vibración que pueda a la Tierra empujar. Son pensamientos altísimos, que apenas podéis comprender, porque el pensamiento se pone en acción y es como una herramienta maravillosa que todo lo crea por doquier.

 

Uníos en estos momentos aquellos que aquí estáis, a esos pensamientos de esa asamblea divina para que así el cielo y la Tierra unidos, puedan mayor eficacia tener, para ir alcanzando ese punto culminante de que el cambio en la Tierra llegue por doquier.

 

Trabajos maravillosos que desde los cielos se están haciendo, y que cada día más conscientes de ellos debéis de ser. Por ello, id preparando vuestra mente cuando llegáis a vuestras meditaciones, para invocar ese deseo de colaborar en esa gran tarea sublime en su enaltecer.

 

Trabajad en vuestros pensamientos y en vuestras actitudes para potenciar más vuestra presencia espiritual, para que esa presencia vaya tomando el papel principal en vuestra vida, ampliando vuestra capacidad espiritual.

 

Son momentos importantes en que debéis de ser conscientes de vuestro deber, y ampliar vuestra mente; quitar todo horizonte que os pare y dejarla que vuele por doquier. El horizonte es muy amplio, ¡Que no tiene límites para vuestro mental! ¡Abridlo por completo y dejad que se expanda vuestro poder espiritual!

 

Todo está en vuestra mano porque vuestro todo es, pues todos somos hijos del Padre y a todos nos ha dado su Amor con su divino querer.

Buscad la esencia de vosotros mismos para encontrar el Universo en vuestro propio ser, y veréis cómo se amplía vuestro horizonte mental para todo poderlo comprender.

 

La vida es maravillosa; la vida alienta en vuestro propio ser. La vida, cuando se entiende por completo, es primorosa, y no hay rendija por la que ninguna oscuridad se pueda entremeter.

 

Sentid la vida en vuestro ser. Decid: “Yo Soy la Vida”, porque no podréis decir mayor verdad. Que en la vida ¡Hay tanto dentro…! ¡Tantas maravillas hay recogidas…! Que hay que saberlas desmenuzar, sintiéndolas profundamente en vuestro interior, de forma que la luz penetre de tal manera, que todo se despeje y la claridad mental sea tal, que seáis uno con el Padre, viviendo una sinfonía eterna de Amor y de Verdad.

 

Maravillas que se os transmiten porque sois capaces de poderlas comprender. Hacedlas realidad en vuestra mente y extenderlas, derramándolas por toda la humanidad.

 

Paz, Amor y Luz en vuestras mentes, y una Chispa Divina en vuestro alentar, dando claridad a esa bella simiente para que se expanda y crezca, hasta la infinitud en su llegar.

Dad rienda suelta a vuestros sentimientos, y vuestros pensamientos dejarlos volar. Siempre la armonía de sentirse unidos, dentro de ese océano infinito del Padre Celestial. Que Él os rodea por completo, y os mece en esa sinfonía genial, en la que nada disturbe vuestra armonía sino que las aguas tranquilas siempre se puedan encontrar.

 

Paz de nuevo os digo para todos. Paz y armonía en vuestro caminar, siempre con la mirada fija en este universo grandioso que abiertas sus puertas están de par en par.

 

Penetrad en ello con la grandeza de vuestro amar, y vuestra mente abierta por completo para dar, dar sin parar.

 

Liberaos de cualquier sometimiento que quiera doblegar vuestra voluntad, y desplegad vuestras alas al viento y ya en el infinito, ¡Volad hasta el confín de vuestro inmenso amar!

 

El Cristo Cósmico